jueves, 25 de octubre de 2007


Es bajo tus miradas donde nunca zozobro;
es bajo tus miradas tranquilas donde cobro
propiedades de agua; donde río, parlera,
cubriéndome de flores como la enredadera.

Es bajo tus miradas azules donde sobro
para el duelo; despierto sueños nuevos y obro
con tales esperanzas, que parece me hubiera
un deseo exquisito dictado Primavera:

Tener el alma fresca, limpia; ser como el lino
que es blanco y huele a hierbas. Poseer el divino
secreto de la risa; que la boca bermeja

persista hasta el silencio postrero, bella, fuerte,
¡y libe en la corola suprema de la Muerte
con su última abeja!

Alfonsina Storni

Tú me miras

Tú me miras, amor, al fin me miras
de frente, tú me miras y te entregas
y de tus ojos líricos trasiegas
tu inocencia a los míos. No retiras

tu onda y onda dulcísima, mentiras
que yo soñaba y son verdad, no juegas.
Me miras ya sin ver, mirando a ciegas
tu propio amor que en mi mirar respiras.

No ves mis ojos, no mi amor de fuente,
miras para no ver, miras cantando
cantas mirando, oh música del cielo.

Oh mi ciega del alma, incandescente,
mi melodía en que mi ser revelo.
Tú me miras, amor, me estás mirando.

Gerardo Diego

Bajo el cielo


Bajo el cielo contemplo la luz de tus ojos,
la luna parece ocultar algún secreto
yo, disimulo, entre mis sonrojos
y a la luz, me pareces más sereno.

Renazco cada día de mi sueño
velando en la noche de tormenta
con la vista fija en el cielo
y sabe, que de no ser cierta
de haber sido pájaro, habría emprendido el vuelo.

Si regreso, con la mirada puesta en ti,
si no te miro, y a escondidas
vislumbro acaso lo que es sentir
que te observe, vida mía,
desde mi cielo.

Un cielo purpúreo y sólo contemplo
tu figura, tu sombra, tus mejillas.
En tanto, yo me oculto, tras las verjas
de aquellas lejanas celosías.

Tras la huida, en la montaña,
cobra todo sentido,
ni te engaño, ni engañas
a la vista, pues al fin puedo ver la luz del día.

Sin temores, sin sombras, espadas ni hachas
que me guarden recelosas, así como el ávaro
su tesoro guardaba, en la noche fría.
De este modo, y sin recodos,
compartir, caminando juntos,
toda nuestra vida.

25/10/2007
Jueves

Yuriarwencilla