Para vivir no quiero
islas, palacios, torres.
¡Qué alegría más alta:
vivir en los pronombres!
Quítate ya los trajes,
las señas, los retratos;
yo no te quiero así,
disfrazada de otra,
hija siempre de algo.
Te quiero pura, libre,
irreductible: tú.
Sé que cuando te llame
entre todas las gentes
del mundo,
sólo tú serás tú.
Y cuando me preguntes
quién es el que te llama,
el que te quiere suya,
enterraré los nombres,
los rótulos, la historia.
Iré rompiendo todo
lo que encima me echaron
desde antes de nacer.
Y vuelto ya al anónimo
eterno del desnudo,
de la piedra, del mundo,
te diré:
«Yo te quiero, soy yo».
Ser de ti
me conformo con ser de ti
esa compañera que camina a tu lado,
a la que miras, con el candil
de la luz en tus ojos anhelados.
Mi amor no es máscara ni disfraz
que oculte mi verdadero ser;
en mi pecho guardo este amor
que apenas si comenzó a florecer.
Nada distingue mejor que el nosotros
a eso que somos los dos.
Aunque sin perder nuestros nombres
la alegría de los pronombres
sin capas que oculten la verdad de cada corazón.
27/09/2007
Yuriarwencilla
Y ahora un poema, de esos que aún no te he enseñado. No me preguntes por qué, quizás esperaba el momento justo o quizás....¿quién sabe?
Lo diré bajito
El sabor del silencio y el amargo néctar
del vacío y la desesperanza, ¿quién necesita
ser un mar?Yo quiero ser río,
quiero fluir, vivir, quiero ser agua.
Agua que brota del manantial
de esperanzas de tu boca
para encontrarse fluyendo en ti.
Quiero ser viento, el aire de tu risa
la pausa, cuando hablas.
En un texto, tu punto y seguido,
en una guitarra, la nota que despierte tu oído,
que te haga sobresaltarte, al reconocerla.
En el silencio, quiero ser grito.
No un grito cualquiera -ni de guerra, ni de maldad-
grito de verdad o tal vez un susurro
y te lo diré bajito y al oído...
Te amo
7/04/2007
Yuriarwencilla
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4 comentarios:
El amor, ese informal. Ya lo decía tambien GArcía Montero
Recuerda que tú existes tan solo en este libro
agradece tu vida a mis fantasmas
a la pasión que pongo en cada verso por recordar el aire que respiras
la ropa que te pones y me quitas
los taxis en que viajas cada noche
sirena y corazón de los taxistas
las copas que compartes por los bares con las gente que
viven en sus barras
recuerda que yo espero al otro lado de los tranvías cuando llegas tarde
que centinela incómodo el teléfono se convierte en un huésped sin noticias
que hay un rumor vacío de ascensores, querellándose solos convocando mientras suben o bajan tu nostalgia
recuerda que mi reino son las dudas de esta ciudad con prisa
solamente y que la libertad cisne terrible no es el ave
nocturna de los sueños, sí la complicidad su mantenerse herida por el sable
que nos hace sabernos personajes literarios, mentiras de verdad,
verdades de mentira, recuerda
que yo existo porque existe este libro, que puedo suicidarnos con romper una página.
saludos amiga poeta!
g en Enfemenino, el segundo o tercer articulo fue precisamente este poema de Salinas. La verdad es que pongo muchos, y mas que pondría pero temo aburrir a mis posibles lectores, yo es que en el , maestro, encuentro siempre todas las respuestas, en versos sencillos pero ¡ tan profundos!.
Mi enhorabuena por otra parte que me alegro que te decidieras a publicar algo tuyo, "Quiero ser viento, el aire de tu risa
la pausa, cuando hablas."
¡¡¡Precioso!!
Besos genia, de un apompa acatarrada.
Saludos.
Por ahí (http://gatossobreeltejado.blogspot.com/2007/09/al-pie-de-la-barra.html) me econtré con una cita que usted hizo sobre algún escrito mío. Le agradezco infinitamente el gesto y quedo a sus ordenes.
Israel G. Araujo
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